A estar sola se aprende, no es fácil, pero se aprende.
Al principio cuesta, el silencio lo hace desesperante,
La tristeza y los recuerdos lo complican más.
La falta de rutina, los pasos ausentes, las cosas más cotidianas.
No ayuda encontrar sus cosas por cada rincón de la casa.
La sombra del recuerdo de quien un día estuvo ahí…
Hasta que la soledad es tan, pero tan evidente, que te golpea en la cara.
Y aprendés, (a la fuerza, porque no te queda otra que aprender)
A soportar el vacío en la cama. A desperezarte con fuerza.
Te haces amiga del silencio y a veces lo espantas con música y baile para sentirte menos sola. Para no escuchar todos tus pensamientos.
Sentís libertad en los pasos que das, te das cuenta de lo que significa estar sola.
Descubrís que no necesariamente tiene que ser una soledad angustiante.
Y empezás a disfrutar de tu lugar, de los olores, del orden eterno.
De las visitas a cualquier hora de la madrugada.
De la cama compartida solo cuando tenés ganas de compartirla.
Y es así, a estar sola se aprende, o te acostumbras, pero te hace feliz estar en casa…
Y si totalmente, es asi. Llegara un dia que tanto te guste la soledad, la independencia que quizas no creas querer dejarla por nada.
ResponderEliminarLa vida pasa y uno se amolda, a la soledad, a la convivencia, a depender, a ser independiente. Ciertamente lo unico importante es jamas aprender a ser infiel a uno mismo
Si me parece que uno puede acostumbrarse y aprender todo... pero las ganas son fundamentales.
ResponderEliminarEn mi caso, a lo que yo le tenía tanto temor, hoy me genera felicidad...
Es eso, encontrarse entre tanta gente no es fácil. Pero que lindo es verse a lo lejos.
Lo bueno de esto morrita hermosa, es APRENDER.
ResponderEliminarTenemos casos de sobra en los que algunos no han aprendido nada. Sentite feliz por madurar siempre un poco más, sumar una experiencia mas de vida, y como siempre.. SE FELIZ!
Seamos Felices juntas! aprendamos... Seamos Bien!
ResponderEliminarte quiero, gracias por estar!